Llamamiento a los jovenes

Juventudes Unificadas del Foro Ermua, 31 de enero de 2007
El 3 de febrero la España civil y democrática de Ermua va a decir, no a la negociación con ETA, no a las condiciones del chantajista, no a las contrapartidas políticas ni penitenciarias para que ETA supuestamente “acepte el juego limpio de nuestro sistema de libertades” y haga lo que hacemos todos nosotros, sin exigir nada a cambio.

“Con nuestro futuro no se negocia”. Jóvenes de España, nos dirigimos a vosotros, a todos sin excepción, para que digáis con vuestra presencia ese "no" al chantaje que es un "sí" decidido a la libertad, a la memoria de las víctimas y al sentido de su generosidad.

Nos dirigimos a ti, que eres como nosotros, que tienes nuestra edad y que tantas veces te has rebelado contra el terror de ETA y la miseria moral de sus cómplices. El sábado 3-F vamos todos a tener una gran ocasión de mostrar en público esa profunda rebeldía.





Manifiesto por la unidad de los jóvenes para reavivar el Espíritu de Ermua Juventudes Unificadas del Foro Ermua, que fue presentado por primera vez en junio 2005



1.- Quienes componemos la Juventudes Unificas del Foro Ermua somos constitucionalistas y algunos de nosotros concejales del País Vasco, que tenemos que ir escoltados hasta cuando nos despedimos en los portales de nuestras parejas después de haber ido al cine o a dar un paseo. Nos hemos acostumbrado a convivir con el terror y a vivir diariamente una situación inadmisible sólo por expresar nuestras ideas. Todos hemos nacido en la democracia pero no hemos conocido un solo día de nuestra vida sin ETA y sin la presión de ese nacionalismo obligatorio, totalitario y cómplice de ETA. Muchos hemos perdido a personas cercanas y alguno ya sabe, entre nosotros, lo que es recibir la noticia de que ETA planeaba asesinarle. Por eso te pedimos que vengas, que te solidarices y que te rebeles con nosotros, que des sentido a nuestra lucha democrática contra ETA y contra el nazismo de hoy.

2.- Contra los nazis de ayer nada podemos hacer y además ya fueron derrotados. Pero sí podemos hacer algo -¡podemos hacer mucho!- contra los de hoy. Tú tienes con nosotros la posibilidad de contribuir a derrotar a este Hitler de aquí y de ahora que es ETA. Tienes la oportunidad de abrazar la última causa romántica y democrática de Europa. No la dejes pasar. No digas que no se puede hacer nada, que tienes muchos exámenes y que no tienes causas por las que luchar. No mires hacia otro lado.

3.- Como comprenderás con una situación como la nuestra tiene que dolernos e indignarnos que algunos quieran presentar a los escuadristas de la "kale borroka", a las juventudes hitlerianas de Jarrai-Haika-Segi que son ETA como si fueran "toda la juventud vasca", como si fueran parte de la juventud española. Nosotros somos más jóvenes que ellos porque creemos en la libertad, porque estamos pagando un caro precio por ella y porque estamos haciendo día a día la España cívica y solidaria con la que ellos quieren acabar.

4.- Cuando las jornadas de julio de 1997 tras el asesinato de Miguel Ángel Blanco muchos de nosotros estábamos todavía en el colegio y en el instituto pero salimos a la calle y nos movilizamos para decirle "no" a ETA y "no" al chantaje que le costó la vida al joven concejal. Muchos de nosotros somos aquella "generación de Ermua" que tomó conciencia democrática y se sintió comprometida por primera vez en aquellas fechas. Luego nos hemos ido acercando al foro cívico que se creó tomando la referencia de aquella revolución democrática de julio, hemos ido creando dentro de este colectivo un núcleo joven y hemos dado el salto a toda España.

En las Juventudes Unificadas del Foro Ermua estamos gente que coincidimos en lo importante y que hemos trabajado juntos en las manifestaciones constitucionalistas del País Vasco siendo de diferentes partidos, o de ninguno. Nosotros no te vamos a pedir el carné como en los tiempos de Franco y como hacen los nacionalistas. Aquí caben todos los carnés, todas las banderas, todas las siglas, todos los símbolos que signifiquen democracia. Nosotros trabajamos para que la unidad frente al terrorismo y al nacionalismo totalitario no sea una invocación retórica vacía de sentido o cargada de una oculta voluntad de traicionar los principios y valores democráticos. La unidad en sí misma no es un valor. No tiene sentido si es para una mala causa o para incidir en el error y equivocarnos juntos. Nosotros luchamos por una unidad ciudadana que sirva para derrotar a ETA y por la cultura de la convivencia, la cultura democrática de Ermua y de aquel manifiesto fundacional del 13 de febrero de 1998 que exigía "de los partidos y representantes políticos que no consientan ni insinúen especie alguna de transacción o formalización de acuerdos sobre las exigencias políticas de ETA pues una cesión al chantaje de las armas significaría la quiebra de la legitimidad democrática".