DEL CHE GUEVARA, O DEL ODIO EN CAMISETA (I)

Comienza Álvaro Vargas Llosa su revelador ensayo “The Killing Machine: Che Guevara, from Communist Firebrand to Capitalist Brand” subrayando el hecho de que éste personaje, que tanto hizo por destruir el capitalismo se haya convertido, precisamente, en la quintaesencia del mismo. Y así es. Hoy, por cualquier parte podemos ver a los peones de la retroprogresía adornados con camisetas, gorras, pins, tazas… con la efigie de un tipo que no fue más que lo que Vargas Llosa denuncia en el título mismo de su ensayo: una máquina de matar. Precisamente por ello es imprescindible luchar por la hoy tan manida verdad histórica, único arma capaz de talar el mito del Ché. Además del citado ensayo, resulta imprescindible la biografía “Che Guevara” de Fernando Díaz Villanueva, sobre la que mayormente me baso para escribir lo que sigue.

En principio, el hecho de que un ciudadano argentino sin titulación universitaria, sin haber realizado el servicio militar y sin haber practicado nunca trabajo alguno pase a la Historia como el héroe de una revolución cubana, médico de profesión, comandante y símbolo de los trabajadores y los pobres del mundo no dejaría de tener su gracia si el personaje en cuestión no atendiera al nombre de Ernesto Guevara de la Serna, Ché para el siglo, y no hubiera sido el responsable directo de miles de asesinatos.

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